volando cometas al atardecer |
El día amanece chunguísimo y lo que es
peor: amenaza con empeorar. Ya lo dije hace dos post: febrero es un asco. Me consta
que hay personas estupendas que han nacido en este mes y que florecerán los
almendros el día menos pensado... pero de momento sólo hay gris cenizo por
todas partes y un frío que pela. Por si fuera poco es domingo y no tengo ganas
de hacer ninguna de las tareas que he ido dejando para el “día libre”
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Además estoy preocupado por el gato que tiene –otra vez- obstrucción urinaria y no sé si podrá aguantar sin que le estalle la vejiga hasta que su veterinario abra mañana la consulta.
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pareja camino del faro de Trafalgar |
Además estoy preocupado por el gato que tiene –otra vez- obstrucción urinaria y no sé si podrá aguantar sin que le estalle la vejiga hasta que su veterinario abra mañana la consulta.
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Duna bajo el toldo |
Entretanto me
entretengo tecleando en el ordenador estas chorradas mientras pienso en el
último post que dediqué a la feliz idea de que la felicidad es posible y
obligado requisito para vivir como es debido. Soy la monda.
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al descubierto |
Para ilustrar el
post recurrí a unos dibujos a lápiz que hice hace tiempo y durante años. Creo
que son adecuados porque... bueno: por razones evidentes y ya está. Y tengo
muchos, muchísimos, porque en aquellos años no me
separaba de los cuadernos ni de una caja de lápices de colores y aprovechaba
cualquier situación de calma para ponerme a ello, dale que te pego. Algunos son
muy buenos, me parece a mí; pero con todos o con casi todos me lo he pasado en
grande.
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Una de las cosas que más me gratificaba era no necesitar nada especial para ponerme y sacar un partido nuevo y distinto a las mismas situaciones cotidianas de mi vida, Situaciones que de no ser por la posibilidad de dibujar quizás me hubieran parecido menos interesantes y divertidas. Supongo que es la magia potagia de pintar lo que ves: te hace estar mucho más atento y sacar más partido de lo ordinario porque al prestarle tanta atención te das cuenta de que ordinario no tiene nada.
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duna, bowie y el Levante |
Una de las cosas que más me gratificaba era no necesitar nada especial para ponerme y sacar un partido nuevo y distinto a las mismas situaciones cotidianas de mi vida, Situaciones que de no ser por la posibilidad de dibujar quizás me hubieran parecido menos interesantes y divertidas. Supongo que es la magia potagia de pintar lo que ves: te hace estar mucho más atento y sacar más partido de lo ordinario porque al prestarle tanta atención te das cuenta de que ordinario no tiene nada.
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el espectador al sol |
Quise publicar
algunos de los dibujos que hice a los amigos que pasaban por casa a menudo. De
cada uno de ellos tengo unos cuantos y me resulta gracioso ver cómo su imagen
va cambiando a medida que yo voy evolucionando en mi manera de dibujar. Elegí
sólo unos pocos de una época muy concreta por aquello de la coherencia y la
unidad que parece ser el requisito anhelado por los que nos creemos
incoherentes y difusos. Y también porque algún criterio hay que seguir si se
quiere acotar un poco el terreno.
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Quizás en otro momento de este blog me entretenga en presentar otra de las muy posibles selecciones que se me ocurran. En cualquier caso creo que merecerá la pena. Si queréis que os diga la verdad, me parece que esos dibujos están entre lo mejorcito que he hecho: Todavía sigo bebiendo de esa fuente que, por cierto, encontré por casualidad. Pero esa es otra historia.
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veteranos y recien llegados |
Quizás en otro momento de este blog me entretenga en presentar otra de las muy posibles selecciones que se me ocurran. En cualquier caso creo que merecerá la pena. Si queréis que os diga la verdad, me parece que esos dibujos están entre lo mejorcito que he hecho: Todavía sigo bebiendo de esa fuente que, por cierto, encontré por casualidad. Pero esa es otra historia.
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nudistas |
El caso es que
mientras hacía la selección de los retratos, desfilaron por el archivo de la
pantalla parte de los
dibujos que hice en la playa, en las soleadas y perfectas
playas de Cádiz durante los días que pasaba allí cada verano... por aquel
entonces. Y me ha parecido que para seguir con el argumento de la felicidad y
por cambiarle la cara a este día de febrero tan, pero tan gris, iba a estar
justificado incluir aquí unos cuantos. Unos pocos que se parecen a los retratos que acabo de publicar porque , igual que estos, tambien aquellos evolucionaron tanto que parecen lugares distintos así que dejo las comparaciones para otro post.
Y ya de paso
buscarme la excusa para no hacer lo que se supone que era la tarea de hoy.
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delgadochicopelirrojoalsol |
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